Masseria Giampaolo e Monacelli en Casalabate, en la provincia de Lecce. Son masías fortificadas convertidas en residencias para unas vacaciones de ensueño. La historia, la gastronomía y el arte te reconcilian con la vida.
Cuando puedas hacer un viaje a Apulia, no te olvides del extremo del tacón de la bota. El Salento es la región más lejana y con mayor crecimiento turístico de los últimos años. Muchos días de sol sin lluvia, ofertas de vacaciones en zonas atractivas desde el punto de vista histórico-geográfico, por la belleza de sus paisajes y la riqueza de su gastronomía.
Crece el turismo en todo el Salento
El turismo en el Salento ha registrado un aumento del 15 % en 2024, tanto en los meses de temporada alta (junio, julio, agosto) como en la temporada baja (abril, mayo, septiembre, octubre). Especialmente Lecce y Gallipoli han experimentado un notable crecimiento turístico en los últimos años. Este aumento se debe tanto a la popularidad entre los turistas italianos como al crecimiento del turismo internacional. En 2024, Lecce superó el millón de visitantes, mostrando un crecimiento considerable en comparación con 2019. Gallipoli también ha pasado de 664 060 visitantes en 2022 a 788 840 en 2024, consolidando su posición como una de las localidades más visitadas.
La abadía de Santa Maria di Cerrate, donde se le apareció la Virgen María al príncipe Tancredi di Altavilla
Si tiene la oportunidad de alquilar un coche en Bari o Brindisi, los aeropuertos más cómodos para ir a Salento, diríjase a la carretera provincial Squinzano-Casalabate Sud. Busque la abadía de Santa Maria a Cerrate (siglo XII). Uno de los ejemplos más significativos del estilo románico en Apulia. Parece ser que al príncipe Tancredi di Altavilla, durante una partida de caza, se le apareció la Virgen entre los cuernos de un ciervo, de ahí el nombre de la iglesia, que cuenta con un portal de entrada del siglo XIII. En el exterior hay un pórtico del siglo XIV, con columnas poligonales con capiteles figurativos. Frente al pórtico exterior hay un pozo del siglo XVII decorado con motivos barrocos. En el interior de la abadía, un importante molino subterráneo abastecía a toda la economía de la zona. Alrededor de 16 masías fortificadas representaban el feudo de la Abadía de Cerrate.
La masía Monacelli data del siglo XVII, pero la torre es del siglo XV.
Recorriendo la carretera al noreste de Lecce, hacia Brindisi, se encuentra la Masseria Monacelli (del siglo XVII) con una torre del siglo XV, un fortín de dos plantas con imponentes contrafuertes angulares, corazón de la Masseria Giampaolo, dos masías unidas. Para facilitarles la búsqueda, les dejo aquí la dirección: Masserie Monacelli e Giampaolo, Contrada Monacelli – Strada provinciale Squinzano – Torre Rinalda, 73100 Casalabate, Lecce; Tel. +39 0832 382037; www.tenutamonacelli.com .
Mobiliario elegante de época que te transporta a la Edad Media
Una escalera exterior conduce a la suite «La Castellana» (60 m²), que recomendamos reservar aunque sea la más cara. Vale la pena. En su interior encontrará un mobiliario elegante, muebles de época y unas vistas impresionantes a un mar de olivos de 320 hectáreas. Parece que se vive en la Edad Media, si no fuera por la ducha, visible desde el dormitorio, del que solo la separa un gran ventanal. Un toque de erotismo en un ambiente medieval.
Desde la habitación se accede a la terraza superior. Antiguamente se hacía para defenderse de los asaltantes, ahora para hacerse un selfie con vistas al mar de olivos. Incrédulos ante tanto espacio y tanta luz. La piscina del resort está rodeada de olivos. Estarás en un lugar de paz y silencio, lejos del bullicio del mar, que, sin embargo, está a pocos minutos en coche.
Un auténtico hotel donde el lujo reside en la singularidad del lugar.
Las masías fueron renovadas en 2007. Hay 24 habitaciones en total. Las habitaciones más amplias se encuentran en la Masseria Giampaolo (35 m²) con altillo. El patio interior ha sido limpiado, pero se conserva el camino con surcos excavados en la roca. Dos grandes ojos de buey son las tomas de aire del molino subterráneo, realmente valioso. Se puede visitar. Un césped inglés salpicado de olivos centenarios conduce a la moderna piscina. El agua turquesa contrasta con el césped verde. También se puede almorzar junto a la piscina, bajo una estructura tipo granero que alberga una amplia mesa. La piscina conecta Masseria Giampaolo con Masseria Monacelli. Las habitaciones estándar de Monacelli dan al patio interior o al olivar. El restaurante está en la planta baja. En verano hay una terraza, «Rifugio del re», donde se puede cenar con vistas al mar de olivos y degustar platos de la cocina salentina.
Cocina «pobre» para decir que tiene raíces profundas en la tradición
Cocina aparentemente pobre, basada en verduras cultivadas y silvestres, pescado azul, harinas poco refinadas, carne de caballo y cordero. Pruebo una pasta ciceri e tria, es decir, una especie de tagliatella pero sin huevo, en parte frita en aceite de oliva virgen extra y en parte hervida con garbanzos. Es una cocina sabrosa, en la que se hace un uso abundante de las especias mediterráneas: tomillo, salvia, romero, mejorana, menta y orégano. La influencia oriental se nota en la presencia de almendras, miel y canela.
Los servicios son de primera calidad: cama doble, secador de pelo, televisión, teléfono, minibar, kit de belleza de cortesía, caja fuerte, calefacción o aire acondicionado. La acogida es agradable y profesional.
El pueblo de Casalabate es, obviamente, un sincronismo de Casa dell’Abate. Más allá de la Torre Specchiolla comienza una playa de arena muy fina con otras dunas doradas que merecen una visita.