Donde el asado argentino abraza al Oriente. Creado por los chefs Germán Sitz y Pedro Peña, este santuario de fusion asiático-argentino no es solo un restaurante: es un manifiesto cultural, una inmersión en rojo neón y un desafío a los paladares convencionales
En el corazón de Wynwood, Miami, donde el arte callejero grita y la innovación palpita, ha aterrizado con fuego y audacia el fenómeno gastronómico que incendió Buenos Aires. Tras su nacimiento en 2017 en el barrio de Palermo Soho y su coronación como #34 en Latin America’s 50 Best Restaurants, su primera expansión internacional elige Miami para reescribir las reglas del juego . “Niño Gordo nunca fue sobre seguir tendencias, sino crearlas“dices Pedro Peña de su criadura. En Wynwood, esa llama recién comienza a arder.
Wynwood y Palermo: Hermanos de Resistencia
“Wynwood y Palermo comparten el mismo ADN: son espacios de resistencia cultural transformados por el arte y la comunidad. Queremos traer el fuego que encendimos en Buenos Aires y hacerlo arder aquí, donde la expresión artística y las historias de desplazamiento vibran en cada esquina“, afirma Germán Sitz .
Esta filosofía rebelde se materializa en un espacio de 74 asientos diseñado como una novela gráfica viviente. Bajo luces rojas ominosas y con un mural colosal del artista argentino Ever Siempre —el doble de grande que su versión porteña—, el local despliega cuatro ambientes: una sala principal con acuarios y lámparas suspendidas, un cuarto dorado de espejos infinitos, un bar diner con personajes de cómic y… un secreto .
Dekotora: El Corazón Oculto
Detrás de una máquina expendedora de cigarrillos vintage, se esconde Dekotora, un bar speakeasy inspirado en la subcultura trucker japonesa. Aquí, proyecciones rotativas, asientos que emulan cabinas de camión y cócteles con glitter ice cubes crean un viaje psicodélico. La barra, liderada por la gurú de mixología Christine Wiseman, sirve alquimias como el Neon Skyline (Patrón infundido con shiso) o el Electric Midnight (whisky japonés con tamarindo, curry y coco) . Es el rincón donde Miami se fusiona con las costas pesqueras de Japón en un brindis.
Sabores que provocan: menú como Arte de Guerra
El menú no replica Buenos Aires: se reinventa con ingredientes locales. Pedro Peña, cuya obsesión por las cocinas asiáticas nació de sus viajes por Corea, Japón y Tailandia, prioriza la evolución sobre la imitación: “En Buenos Aires, nuestro ancla era la parrilla y el fuego. En Miami, es la calidad y variedad de productos locales” .
Platos Emblemáticos:
– Katsu Sando: El único “invariante” porteño. Pan shokupan, carne de res empanizada, salsa tonkatsu y mayonesa japonesa .
– Cauliflower Karaage: La sorpresa convertida en éxito. Coliflor crujiente con uvas, anacardos y hierbas frescas .
– Arroz Frito con Langostinos de Key West: Un tributo a Florida con cangrejo, tocino y brotes de soja .
– Pato Pekinés: Jugoso, con hoisin, bok choy y crepes para armar .
Tragos con actitud: Mixología en dos frentes
Wiseman despliega dos cartas: una para el comedor principal y otra para Dekotora. En la primera, destaca el Red Bean Old Fashioned (redes cubierto con red bean demerara) y el Papaya Salad Daiquiri, ácido y refrescante. En Dekotora, la teatralidad es ley: hielo tallado al instante y combinaciones como el Cherry Blossom Negroni (gin Ford’s infusionado) desafían los sentidos .
Más que cenar, vivir una Revolución
Niño Gordo Miami es una experiencia cinética donde cada detalle —desde el crujido del karaage hasta el ritmo punk de la banda sonora— está orquestado para conmover. Abierto de miércoles a domingo (6 PM – 12 AM), con Dekotora extendiendo la fiesta hasta la 1 AM, este espacio no solo alimenta cuerpos: incendia imaginarios .
Dirección: 112 NW 28th St, Miami, FL 33127
Reservas:OpenTable o +1 786-889-8093
Siguelos: @xniniogordomiax; https://www.instagram.com/xniniogordomiax.