El espíritu empresarial, la artesanía, la moda y la enogastronomía están influidos por los lazos con la madre patria y la capacidad creativa típica de nuestros emigrantes. No es Made in Italy, pero se le parece mucho. Lo llamaremos Made by Italians, porque es obra del saber hacer de los italianos en el extranjero. También necesitaríamos esta marca para defender su identidad.
Brasil es líder en biodiversidad alimentaria, con 3.000 especies comestibles. La agricultura familiar (a menudo gestionada por comunidades italo-brasileñas) produce el 70% de los alimentos consumidos localmente. Slow Food Brasil promueve productos tradicionales como el abacaxi pequeno (piña autóctona) y el waranà (parecido al guaraná), a menudo cultivados por pequeños productores de origen italiano.
En el sector enogastronómico, empresas como Aurora, una cooperativa vinícola fundada por inmigrantes italianos, pueden ser un indicio de la capacidad de «savoir faire» de todos los italianos en la producción de vino en Rio Grande do Sul.
Bodegas de origen italiano
En la Serra Gaúcha encontramos la Bodega Boutique Lidio Carraro. Esta familia italiana se dedica a la viticultura desde hace más de cinco generaciones, especializándose en vinos de alta calidad como el Merlot ‘Grande Vindima’.
Vinicola Videiras Carraro: otra bodega familiar, ligada a la tradición italiana, que produce vinos artesanales.
Casa Pedrucci, Vinícola Courmayeur, Vinícola La Cantina, fundada por inmigrantes italianos, conocida por sus vinos espumosos y tintos como el Merlot y el Cabernet Sauvignon .
En el Vale dos Vinhedos, el Grupo Vinícola Miolo, fundado por una familia italiana, es una de las bodegas más renombradas de Brasil, con vinos premiados internacionalmente como el «Miolo Testardi Syrah». El Valle fue la primera región brasileña en obtener la Denominación de Origen (DO) en 2012, gracias al trabajo de familias italianas que han preservado los métodos tradicionales.
En Santa Catarina, se encuentra la bodega Remy-Lacave. Fundada por descendientes de inmigrantes italianos, produce vinos de altura, como Pinot Noir y Chardonnay.
En São Paulo se encuentra Bramasole Vinho De Boutique. También mencionada en la región de São Paulo, con una producción vinculada al terroir local pero con influencias italianas .
Vinos espumosos brasileños y también hay un champán
Bodega Peterlongo: la única empresa brasileña autorizada a utilizar el término «Champagne» para sus vinos espumosos, siguiendo las normas francesas .
Bodega Salton. Esta bodega también tiene raíces italianas y está entre las más antiguas del país, con una producción que va desde los espumosos a los tintos estructurados .
Garibaldi es la capital del vino espumoso brasileño. Bramasole Vinho De Boutique es una bodega artesanal que produce vino espumoso con métodos tradicionales, vinculados a la cultura vinícola italiana. Milantino Vinhos e Espumante se especializa en vinos espumosos, con técnicas heredadas de los inmigrantes italianos.
Blairo Borges Maggi, el rey de la soja
En la página web de Slow Food leemos que «desde el 12 de mayo, Brasil tiene un nuevo Ministro de Agricultura interino, Blairo Borges Maggi, nacido en 1956, agrónomo de formación y ex senador de Mato Grosso».
Blairo Maggi, como su apellido indica, tiene orígenes italianos. Nació el 29 de mayo de 1956 en São Miguel do Iguaçu, en el estado de Paraná, Brasil. Se licenció en agronomía por la Universidad Federal de Paraná. Es Presidente del Grupo Amaggi, una de las mayores empresas del mundo en producción, transformación y exportación de soja, con intereses también en infraestructuras como terminales, autopistas y vías navegables . Fue senador y ministro de Agricultura con el presidente Michel Temer (2016-2019) . Conocido por sus críticas a la deforestación de la Amazonia, recibió el «Premio Motosierra de Oro» de Greenpeace en 2006.
Moda y diseño: reconocer la «marca» de la creatividad italiana
Alexandre Herchcovitch. Nacido en São Paulo en 1971 en el seno de una familia judía de origen polaco y rumano, con influencias culturales italianas en la comunidad judía brasileña . Empezó a diseñar ropa a los 10 años, influido por su madre, empresaria de lencería. Estudió moda en la Faculdade Santa Marcelina y lanzó su marca en 1994, haciéndose famosa por sus estampados excéntricos, calaveras estilizadas y referencias contraculturales. Presentó colecciones en Nueva York, París y Tokio. Colaboró con Vulcabras Azaleia (fábrica de zapatos) y la marca sostenible À La Garçonne . Su estilo es una mezcla de punk, religiosidad judía y estética kitsch, con piezas icónicas como vestidos de látex y prendas inspiradas en las «boias-frias» (campesinas) .
Ronaldo Fraga. Nacido en Belo Horizonte y vinculado a la comunidad italo-brasileña. Estudió en la Parsons School of Design (Nueva York). Utiliza la moda para transmitir mensajes sociales, como la colección «Disneylandia» sobre la colonización cultural. Integra técnicas artesanales brasileñas, como los bordados del Nordeste. Galardonado por el Ministerio de Cultura brasileño por su labor de valorización de la identidad local .
Estos empresarios aportan al mundo el conocimiento y la creatividad italianos. Sería fácil y natural pensar en ellos como una continuación del Made in Italy. Pero lo que se produce fuera de Italia no puede llamarse así. Así que creemos otra marca, que q a diferencia de Made in Italy defienda a los emprendedores más que a los productos: Made by Italians.
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