Desde el comercio electrónico hasta la biotecnología y las finanzas, los emprendedores de origen italiano han dejado una huella imborrable. Marcos Galperin (MercadoLibre), Ricardo Di Lazzaro (Genera) y Mónica Saggioro (MAYA Capital) han contribuido al ecosistema emprendedor latinoamericano.
América Latina ha sido históricamente un destino clave para la migración italiana, y los descendientes de estos inmigrantes han jugado un papel fundamental en el desarrollo económico y tecnológico de la región. Entre finales del siglo XIX y principios del XX, millones de italianos emigraron a América Latina en busca de mejores oportunidades. Países como Argentina, Brasil y Uruguay recibieron grandes oleadas de inmigrantes, muchos de los cuales se dedicaron al comercio, la agricultura y la industria. Con el tiempo, sus descendientes se integraron plenamente en la sociedad, pero mantuvieron valores como el trabajo duro, la innovación y el espíritu familiar, características clave en el éxito de muchos emprendedores.
Hoy, esa herencia se refleja en líderes empresariales que han revolucionado industrias enteras, combinando la cultura italiana con la visión latinoamericana.
Marcos Galperin: El Rey del E-Commerce Latinoamericano
Marcos Galperin, nacido en Argentina en 1971, proviene de una familia de ascendencia judío-italiana. Estudió en la Universidad de Pensilvania (Wharton School) y luego obtuvo un MBA en Stanford, donde se inspiró en el auge de las startups tecnológicas de Silicon Valley.
Creación de MercadoLibre
En 1999, Galperin fundó MercadoLibre, una plataforma de comercio electrónico que buscaba replicar el éxito de eBay en América Latina. Con una inversión inicial de fondos de capital de riesgo, la empresa creció rápidamente, diversificándose en pagos digitales (MercadoPago), logística (MercadoEnvios) y créditos (MercadoCrédito).
Impacto y Legado
Hoy, MercadoLibre es la empresa de e-commerce más grande de América Latina, con presencia en 18 países y un valor de mercado que supera los $80 mil millones de dólares. Galperin no solo transformó la forma en que los latinoamericanos compran y venden, sino que también impulsó la inclusión financiera en la región.
Su éxito demuestra cómo la visión global, combinada con un profundo entendimiento del mercado local, puede generar empresas de clase mundial.
El 1° de enero Galperin dejarà el cargo de CEO
En el més de mayo saliò la noticia que “veintiséis años después, el fundador argentino dejarà el cargo de CEO, tal como lo había anticipado hace un par de años, para asumir un nuevo rol como presidente de la junta directiva (Executive Chairman), desde el cual continuará marcando el rumbo de la compañía.
A partir del 1 de enero de 2026, Ariel Szarfsztejn, actual responsable del Marketplace de MELI y uno de los principales arquitectos del crecimiento reciente de la empresa, asumirá oficialmente como CEO. El traspaso, cuidadosamente orquestado durante meses, no es un adiós de Galperin a la empresa que fundó desde un garaje en Palo Alto. Como él mismo señaló en una emotiva carta a empleados, socios e inversores, esta transición busca garantizar la sostenibilidad del liderazgo de Mercado Libre más allá de su generación.” (Fuente: Forbes staff – mayo 21, 2025)
Ricardo Di Lazzaro: Revolucionando la Biotecnología con Genera
Ricardo Di Lazzaro, otro argentino de ascendencia italiana, es el fundador de Genera, el primer laboratorio de Latinoamérica especializado en tests genéticos de consumo. Con formación en biotecnología, Di Lazzaro identificó una oportunidad en hacer accesibles los estudios de ADN para el público general.
El Modelo de Negocio de Genera
Genera ofrece pruebas que analizan desde ancestros hasta predisposiciones a enfermedades, con un enfoque en prevención y salud personalizada. La empresa ha logrado democratizar la genómica, algo que antes solo estaba al alcance de laboratorios de élite.
Expansión y Reconocimiento
Con presencia en varios países latinoamericanos, Genera ha sido reconocida como una de las startups más innovadoras de la región. Di Lazzaro representa cómo la ciencia y el emprendimiento pueden combinarse para generar un impacto social masivo.
Mónica Saggioro: Inversión y Empoderamiento Femenino con MAYA Capital
Mónica Saggioro, de origen italiano-brasileño, tuvo una exitosa carrera en Goldman Sachs y RBI (Restaurant Brands International) antes de cofundar MAYA Capital, un fondo de inversión enfocado en startups latinoamericanas en etapa temprana.
MAYA Capital y el Enfoque en Mujeres Emprendedoras
MAYA se ha destacado por invertir en empresas lideradas por mujeres y por impulsar la diversidad en el ecosistema emprendedor. Algunas de sus inversiones más notables incluyen Clara (fintech mexicana) y Frubana (agrotech colombiana).
El Rol de la Diáspora Italiana en el Venture Capital
Saggioro ejemplifica cómo los descendientes de italianos no solo crean empresas, sino que también financian el futuro de la innovación en la región. Su trabajo ha sido clave para reducir la brecha de género en el emprendimiento tecnológico.
Una nueva marca que proteja a quienes producen
La creatividad, el conocimiento y el saber hacer siempre han caracterizado el genio de los italianos en la realización de sus actividades, en cualquier campo productivo y cultural. Por eso, quiero lanzar aquí la idea de crear una marca que proteja la pertenencia y el reconocimiento de la creatividad y el saber hacer italiano en el mundo. Podría llamarse «Made by Italians».
Una marca que promueva la cultura empresarial de los italianos, de todas las generaciones, en el mundo. Un sello que una todas las actividades culturales, sociales, creativas y empresariales realizadas por italianos o descendientes de italianos, en cualquier parte del mundo.
No es una marca que compita con el Made in Italy, sino su extensión natural en el exterior. El Made in Italy protege los productos, mientras que esta nueva marca, reservada para quienes son de origen italiano y operan en el extranjero, protege a quienes producen, crean e innovan.
Traerá beneficios a los países donde estos emprendedores, artistas, hombres de negocios, deportistas o políticos desarrollan sus actividades, y también a Italia, que es su referencia. Incrementará el volumen de negocios con las empresas del Made in Italy y, en retorno, también impulsará el turismo y la cultura, gracias a una imagen positiva de Italia.
Adaptación para América Latina
En Latinoamérica, donde millones de descendientes de italianos han contribuido al desarrollo económico, cultural y social, este concepto podría tener un impacto significativo.
Unificaría a emprendedores, artistas y profesionales bajo una identidad común.
Fortalecería los lazos comerciales entre sus negocios y las empresas italianas.
Promovería el intercambio cultural y turístico entre Italia y la región.
«Made by Italians» no solo reconocería su herencia, sino que también les daría una herramienta para destacar su calidad, innovación y conexión con Italia en el mercado global.