El Decreto 36/2025 ha creado gran confusión y descontento dentro de la comunidad de italo-descendientes – mencionó Ricardo Merlo presidente del (MAIE), los descendientes han sentido que sus derechos se han visto violentados sin previo aviso y con gran desconocimiento de la historia y cultura italiana en el exterior.

El gobierno Meloni, dentro de sus posturas políticas, mantenía la postura de respetar el “Ius Sanguinis”, pero en marzo de este presente año decidió cambiar las reglas del juego sin una explicación concreta. Por esta razón, el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, argumentó: situaciones irregulares con los pasaportes, saturación de los municipios italianos y el desarraigo de los italianos en el exterior, “sin entregar evidencias o especificar casos reales de venta de pasaportes u actos inadecuados”.

Ante estas acusaciones y la limitación de los derechos establecidos por la ley, el MAIE, se ha hecho presente para defender la dignidad y la memoria histórica de la diáspora italiana en el mundo, para amparar nuestra identidad y reconocer la igualdad legal. Por esta razón, los coordinadores del MAIE en el continente americano desde Canadá hasta Argentina se han hecho presentes en sus embajadas y consulados para presentar una carta como protesta por escrito en contra del Decreto 36. La carta va dirigida al ministro Tajani, dejando claro que existe representación fuera de las fronteras italianas.

El Movimiento Asociativo de italianos en el Exterior ha sido la única fuerza presente capaz de alzar la voz a favor de custodiar su comunidad sin intereses alternos, debido a la ausencia de presiones externas; todo lo contrario, su disposición nace de la preocupación de muchas familias por perder su legado por descendencia. Por lo tanto, la carta externa:

• Preocupación por la proyección de Italia en el mundo.

• Discriminación entre nacidos en Italia e italianos nacidos en el exterior.

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• Retroactividad de la nacionalidad e igualdad en su aplicación. En Italia, el senador Mario Borghese se encuentra al frente de la defensa, presentando las enmiendas necesarias para frenar y mejorar el decreto, proponiendo cambios que no afecten o violen los derechos de los italianos nacidos en el exterior, externando la necesidad de eliminar el término “nacido en Italia” para proponer “todos somos italianos